viernes, 19 de enero de 2018

Chica universitaria

¿Les ha pasado que no tienen qué ponerse pero al mismo tiempo tienen un closet lleno a más no poder?

No falta ese vestido de graduación de prepa talla 5 que solo te pusiste un par de veces porque el ritmo y los malos horarios de la uni te hicieron subir de peso, ahora no voy a hablar de tallas porque eso requiere que mencione las dietas balanceadas y el la fuerza de voluntad para dedicarle tiempo al ejercicio y el verdadero tema de esta entrada es la nostalgia. 

Se puede sentir nostalgia por casi todo, así como me la paso viendo Sex & the city porque me recuerda el ritmo de vida que teníamos en los 90's y esa extravagante moda que ahora nos parece de mal gusto, algunas veces somos lo suficientemente cursis para regresar a viejos hábitos y lo peor con antiguas parejas.

Mi amiga "la madura" (para el momento en el que escribo esta entrada la he bautizado como Kitten Jones, por la película de Desayuno en Plutón y por Samantha Jones), dice que comparar a un ex con un vestido es la peor metáfora del mundo y no lo niego, pero también creo que es la mejor forma de ilustrar el problema. 

Muchas veces guardamos una prenda porque estamos seguras que se va a poner de moda otra vez, o que por alguna razón mágica vamos a regresar a esa magnifica talla infantil que teníamos en prepa, así con las relaciones que no terminan de buena manera te quedas con ese sentimiento de que pudo haber más. 

Es como ese capitulo en el que participó David Duchovny, en el que era el antiguo novio de Carrie y ella se emociona porque aun siente esas mariposas en el estomago, pero al final descubre que las cosas que viviste no las puedes repetir porque son personas diferentes, como dicen por ahí, entre más nos cambia el tiempo, mas nosotros mismos nos volvemos.
Muchas veces encontramos a ese chico perfecto para nosotras pero nosotras somos las que no estamos en el momento indicado y no hay que sentirse mal por ello, simplemente hay cosas y  situaciones que debemos aprender a dejar ir, así como ese vestido que en el fondo de nuestro corazón sabemos que ya no es para nosotras y debemos dejarlo ir. 



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